Libro que analiza la obra poética de la generación mexicana del Medio Siglo, en la cual se encuentran autores como Jaime Sabines, Rubén Bonifaz Nuño, Rosario Castellanos, Jaime García Terrés, Tomás Segovia y Eduardo Lizalde.
Sobre este volumen, el poeta uruguayo Eduardo Espina escribió: «Con este volumen, donde coincide la lucidez analítica con el rigor intelectual, Rogelio Guedea confirma lo que ya sabíamos quienes desde hace tiempo venimos siguiendo su ascendente carrera en páginas literarias de diarios y revistas: que estamos ante no sólo el mejor crítico de poesía surgido en México en mucho tiempo, sino también frente a uno de los principales expertos en poesía de la lengua. Cada una de las incursiones analíticas de Guedea es una deslumbrante propedéutica de lectura. En su aparato teórico se cruzan escuelas y tendencias de abordaje interpretativo, trabajando en forma conjunta a favor de un razonamiento nada periférico a su materia de estudio, porque de esa forma el peritaje alcanza su efectividad plena y las respuestas encuentran las preguntas buscadas. Es la culminación de un desciframiento. Lo mismo que Hugo Friedrich en su seminal libro Estructura de la lírica moderna –y la comparación no resulta antojadiza- Guedea indica, informa, y revela con sutileza de lector visionario para decir que “de esta forma el poema puede leerse mejor”, tal como las palabras quisieran ser leídas. Esa eficacia de hermeneuta sin altibajos, cada vez más rara en los estudios literarios, convierte a sus diálogos con los textos en una instancia epifánica, de la cual el lector sale, por encima de todo, convencido. Con una precisión que para alcanzar su exactitud no depende de artificios retóricos ni vacuidades ornamentales tan comunes en este metier, Rogelio Guedea esclarece y enseña. Además, escribe muy bien, como los que saben y no necesitan andar demostrándolo en cada frase. La gran crítica literaria, la que es necesaria y se justifica como género aparte, no puede ser menos que eso».